martes, 3 de mayo de 2011

VISIBILIDAD LESBICA

Leyendo, escuchando, viendo y aportando mi grano de arena a este tema, he recordado también mi propia "prehistoria", los primeros tiempos de frecuentar locales de ambiente, sólo para chicas, en los cuales había que llamar a una puerta cerrada donde una chica, normalmente con cara de palo, te miraba de arriba a abajo antes de darte el permiso para entrar, el cual consistía en una mueca que pretendía ser sonrisa al tiempo que abría otra puerta que daba acceso al local en cuestión. Y, conste que no hablo de una pequeña ciudad de provincias, como en la canción...pongamos que hablo de Madrid.
En aquel momento, la muchacha que solía acompañarme estaba encantada con lo que ella definía como "sentirse igual entre iguales", cosa que no podía discutirle, pero a mi me resultaba muy asfixiante tener que sentirme cómoda escondiéndome, y de hecho tan poco cómoda estaba que muy pronto dejé de ir...Desde luego, en aquel momento, la existencia de estos garitos hizo muy felices a muchas mujeres que, de otro modo, habrían permanecido ocultas en sus hetero-vidas y con su hetero-ocio...etc., pero como yo he tenido la suerte y la voluntad de no estar nunca en el armario, meterme en aquellos armarios más grandes...me resultaba insoportable y opté por vivir como me ha dado la gana, o sea con absoluta normalidad, por que en realidad lo que más nos nos hace visibles es eso, la normalidad del día a día, sin disfraces, sin guetos, sin vergüenza.
Sigo profundamente orgullosa de ser como soy.

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